Con mis amigos siempre he defendido la teoría que a veces una película, de puro mala que es, acaba convirtiéndose en buena, porque se aleja tanto de lo que pretendía que acaba teniendo un valor secundario muy importante. Esto se puede aplicar a todas las películas interpretadas por cantantes, que de drama musical pasan a ser una comedia kisch, o con muchas películas de terror, que se convierten en comedias con comentarios en voz alta de toda la sala de cine. Bien, pues hoy os voy a hablar de una película que me ha fascinado tanto que no se si es que le ha pasado este efecto que os acabo de explicar o verdaderamente es una joya de la serie B: Piraña 3D.
Que conste, antes de empezar, que me arrepiento totalmente de no haber visto esta película en 3D y en pantalla gigante. La ventaja es que ya se ha rodado la segunda parte que, si está a la altura, me permitirá darme un festín. Pero por tonto y no hacer caso a los que me la recomendaron, me he tenido que conformar con una versión más casera, que no necesariamente peor.
Un momento... Esto no será una comedia romántica, ¿no?
La trama es la típica de estas pelis: en un lago en el que se celebra una fiesta de gente buenorra en barcas, concursos de camiseta mojada y mucha cerveza, se abre una grieta en el fondo y emergen unas pirañas prehistóricas con mucha hambre.. así que ya tienen el festín preparado.
La piraña dispuesta a ponerse las botas...
La película es disparatada hasta decir basta, y cumple todos los tópicos para poder disfrutarla: la gente voluptuosa y engreída muere rápido y de las maneras más patéticas posibles, mientras que la gente “del montón” tiene alguna posibilidad de vivir (que no todas) así que sentiros afortunados si tenéis un cuerpo escombro, porque tal vez os dure más que uno recauchutado con prótesis PIP.
Pobrecitas... si supieran la que les espera...
Respecto a los actores que aparecen en la peli, el plantel es bueno. Tenemos a Christopher Lloyd (Regreso al futuro) como científico, Jessica Szohr (Gossip Girl) como “la chica” de la que está colgado el protagonista, el pseudo debutante Steven R. McQueen como el pringao adolescente al que contratan como localizador para una película porno (si, así justificamos los desnudos), y cameos de Eli Roth (Malditos Bastardos, Hostel) o Ricardo Chavira (Carlos Solís en Mujeres Desesperadas) entre muchísimos otros, que no detallo para no aburrir.
¿Veis? Os lo he dicho en la imagen anterior...
Así pues, si os gusta el cine “de cachondeo”, con el que reíros y pasar un mal rato (la escena en que las pirañas atacan masivamente a los bañistas me pareció super agobiante), esta es vuestra película. Porque es el tipo de películas que justifican lo pesados que están siendo con el 3D.
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